Publicado en Rectoría, el domingo 24 de noviembre de 2013

La Rectoría informa que, durante la semana pasada han llegado a la UBA dos cautelares provenientes de los juzgados nacionales en primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal N°3, a cargo de la Dra. Claudia Rodríguez Vidal, y N° 9, a cargo del Dr. Pablo Cayssials.

Estas resoluciones establecen, respectivamente, que dos alumnos (uno del turno mañana y otra del turno tarde) deben ser reincorporados como alumnos regulares. Si bien hemos acatado las mismas y estos estudiantes se encuentran cursando nuevamente, ya se han presentado las apelaciones ante la cámara correspondiente.

Creemos que, de este modo, se plantea una situación inédita y de alto impacto institucional, toda vez que un juez federal interviene en los asuntos internos de un colegio, desconociendo lo actuado por las diferentes autoridades y el Consejo de Convivencia.

Más preocupante es lo sucedido cuando uno de estos jueces resolvió sin requerir al Colegio una mínima información sobre cómo se procedió en el caso.

Además, se genera una clara inequidad entre quienes han aceptado las reglas internas del Colegio, respetando los mecanismos conocidos o no cuentan con los recursos económicos o profesionales para recurrir a la justicia federal.

Debe quedar claro que la cuestión de fondo es si el Colegio puede aplicar o no 20 amonestaciones. En estos casos, estas 20 amonestaciones acumuladas a sanciones previas hicieron que dos alumnos pasaran a la condición de libres.

Esto, en ningún caso, vulnera el derecho a educarse de estos jóvenes, quienes siguen siendo alumnos de quinto año del Colegio y puedan rendir sus exámenes en diciembre, febrero y marzo para finalizar sus estudios.

En otro sentido resolvió, el viernes último, la jueza Liliana Heiland en un tercer caso, quien sostuvo que “la sanción disciplinaria resultaba de un hecho contrario al reglamento interno”, y agregó: “La decisión de poner veinte amonestaciones era justa y razonable ya que nadie quedaba libre por este sólo acto”.